Después del fuego: reconstrucción y unión en la recolección de residuos post incendios forestales

El incendio que afecta a la zona centro-sur del país, está catalogada como la tragedia más grande que azota al país tras el terremoto del 2010. En promedio, al año en Chile, 50.000 hectáreas se ven afectadas por incendios forestales. La recolección de los materiales quemados es fundamental para la reconstrucción de las zonas.

La maquinaria especializada se despliega para manejar residuos voluminosos y peligrosos, garantizando una recolección segura y eficiente. Este enfoque no solo facilita la limpieza, sino que también mitiga riesgos ambientales y de salud pública asociados con los residuos post incendios.

Los siguientes, son 3 puntos básicos a onsiderar para la limpieza y recojo de escombros y desechos peligrosos, producto de un incendio

1. Evaluación de riesgos y seguridad: Antes de recolectar escombros, es esencial evaluar los riesgos, como estructuras inestables o materiales tóxicos. El personal debe usar equipos de protección personal adecuados.

2. Separación y clasificación adecuada: Durante la recolección, se deben separar los desechos por tipo (reciclables, peligrosos, escombros de construcción) para facilitar su disposición final segura y posible reutilización.

3. Gestión adecuada de residuos: Después de la recolección, los desechos deben eliminarse en instalaciones autorizadas y adecuadas, siguiendo protocolos específicos para materiales peligrosos según las regulaciones ambientales y de seguridad.

“La recolección de residuos en estas circunstancias es un esfuerzo de carácter público-privado, enfocado a la recuperación de los espacios de las comunidades afectadas. No es un tema que le corresponda a una sola persona, institución o empresa, el trabajo debe ser conjunto. En este tipo de catástrofes, las manos nunca  sobran y la coordinación debe ser siempre multilateral”, comentó nuestra Gerenta General, Loreto Finsterbusch .

Más allá de la tarea técnica, la recolección de residuos representa un eslabón crucial en el proceso de reconstrucción. La eliminación eficiente de escombros allana el camino para la rehabilitación de áreas devastadas, contribuyendo a la restauración de comunidades y la reanudación de la vida cotidiana.